COMPLICACIONES EN
LA DIABETES MELLITUS
¿Qué complicaciones pueden presentarse?
El efecto de la diabetes no controlada es la hiperglucemia (aumento del azúcar en la sangre), que con el tiempo daña gravemente muchos órganos y sistemas, especialmente los nervios y los vasos sanguíneos.
Accidente cerebro vascular.
Daño ocular o Neuropatía diabética (ceguera).
Enfermedades bucales.
Enfermedades cardiovasculares.
Daño renal (insuficiencia renal).
Enfermedad vascular periférica.
Disfunción sexual.
Pie diabético.
Pie diabético
Puedes tener un alto riesgo de una ulceración en los pies posiblemente por:
Síntomas:
Alteraciones en la sensibilidad que impiden darse cuenta de pequeñas heridas o traumas que pueden progresar.
Alteraciones en la circulación (vasos sanguíneos y los nervios) que evitan una adecuada vitalidad de los tejidos en los pies que pueden conducir a la ulceración y amputación del miembro.
Entumecimiento o cosquilleo en los pies.
Sensación de ardor o quemazón en tus pies.
Dolor en tus pies o piernas al caminar que limita tu movilidad.
Úlceras o amputaciones previas en los pies.
Hinchazón en las piernas o pies.
Deformidad en tus pies que impida el uso de calzado normal.
Limitación visual
Diabetes no ha estado bien controlada.
Hábitos y Consejos Generales:
Daño renal asociado a tu diabetes.
Las amputaciones de piernas y pies de las personas con diabetes pueden prevenirse mediante soluciones técnicamente sencillas y de bajo costo. Hay que fomentar algunos hábitos simples:
No sumerja los pies en agua caliente. Posiblemente, se queme los pies sin darse cuenta.
Vigilar regularmente los pies: Fije un horario para controlar los pies todos los días.
Examinar el interior de los zapatos antes de ponérselos: Controle el interior del calzado antes de ponérselo. Asegúrese de que el forro sea suave y de que no haya ningún objeto dentro.
Mantener los pies limpios: Lávese los pies todos los días. Séquelos con cuidado, particularmente entre los dedos.
Revísese los pies todos los días: Busque manchas rojas, cortes, inflamación y ampollas. Si no puede verse la planta de los pies, utilice un espejo o pídale a alguien que le ayude.
No andar descalzo: Use calzado cómodo y medias en todo momento que proteja sus pies y que tenga buen calce.
Cuidar bien la piel y las uñas: Mantenga la piel suave y tersa. Aplíquese una capa delgada de crema para la piel sobre el empeine y la planta de los pies, pero no se aplique loción entre los dedos de los pies.
Si puede verse y tocarse las uñas de los pies, córtelas siempre que sea necesario. Córtese las uñas de los pies en línea recta, derechas y lime los bordes.
Proteja sus pies del calor y del frío: use calzado en la playa o sobre el pavimento caliente.
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